Es posible que esta sea una traducción mas acertada:
En la balanza incierta de mi razón
los adversarios vacilan,
entre el amor y el pudor,
pero yo elijo lo que veo,
ofrezco mi cuello al yugo:
me someto a tan dulce yugo.
En la balanza incierta de mi razón oscilan, uno contra otro el lascivo amor y el pudor. Pero yo elijo lo que veo, ofrezco mi cuello al yugo me someto al yugo a tan suave, suave yugo
Una leyenda urbana dice que a partir de los 35 años es más fácil sufrir un atentado terrorista que tener una relación afectiva estable. La frase en cuestión además de ser impactante no deja de manifestar una problemática de las sociedades urbanas contemporáneas. Ante el temor al fracaso en sus relaciones afectivas, mucha gente prefiere evitar todo compromiso. Surgen así los amores líquidos, los vínculos frágiles que se mantienen en soportes virtuales. La red se ha convertido en un excelente soporte para este tipo de relaciones, no es necesario tocarse u olerse y es en cambio muy fácil transmutarse, convertirse en otra persona, inventarse y recrearse. En definitiva sustituir la necesidad de contacto humano a través de un instrumento que nos ofrece la posibilidad de no exponer lo que no deseamos. La fragilidad de los vínculos humanos hoy, cuestiona de forma indiscutible la función del matrimonio por amor, así como no es posible organizar las alianzas políticas sobre el p
Decían los clásicos que había que preguntarse por las causas primeras, para no ser presa fácil de las apariencias. Una análisis transversal del informe presentado por la OCDE sobre el estado de la educación en Canarias obliga a profundizar en las causas primeras para no dispersarse entre las ramas de los árboles. Esto es, si un sistema educativo progresista y moderno debe perseguir entre sus objetivos fundamentales el acceso a los recursos intelectuales y simbólicos que permitan un buen desarrollo de las capacidades de cualquier ciudadano. No es menos cierto que las condiciones de partida de todos los ciudadanos no son las mismas, y por ello es necesario no tratar a todos por igual, sino al igual como igual y al desigual como desigual, ejerciendo incluso la acción positiva cuando fuese necesario. Es esa interpretación errónea, a mi juicio, del principio de comprensividad, lo que está en el fondo es la distorsión que sufre nuestro sistema educativo, no sólo en los p
Creo que esta traducción es más certera:
ResponderEliminarEn la balanza incierta de mi razón
oscilan, uno contra otro
el lascivo amor y el pudor.
Pero yo elijo lo que veo,
ofrezco mi cuello al yugo
me someto al yugo
a tan suave, suave yugo
Saludos!